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jueves, 27 de junio de 2013

VIKINGORE-WOLVES IN THE BATTLEFRONT



Los sevillanos Vikingore se han tomado su tiempo para editar este prometedor debut bajo la denominación “Wolves In The Battlefront”. Formados en 2005, la banda tuvo que atravesar por múltiples cambios de formación hasta que en 2007 publicó su primera demo; pero no fue hasta el año 2010 cuando la banda empezó a perfilar, de manera definitiva, su personalidad como colectivo, apostando de forma convencida por una sonoridad más fuerte y compacta en la que se mezclan la brutalidad del death metal y  las atmosferas vikingas con unas letras repletas de alusiones a la mitología nórdica y a los ídolos paganos.

lunes, 24 de junio de 2013

HEATHEN+GENERATION KILL+DUST BOLT-RAZZMATAZZ3-BCN-19-JUN-2013






Resulta cuanto menos irónico que mientras los medios y el público proclaman un resurgimiento del thrash metal “old school”, un concierto como el del pasado miércoles en la sala pequeña de Razzmatazz, no consiguiera congregar a más de medio centenar de personas para presenciar la actuación de los americanos Heathen. Además de la mítica formación de San Francisco, el atractivo cartel de esta noche se completaba con la savia nueva que aportaba el joven cuarteto alemán Dust Bolt, y la  experiencia y profesionalidad de los miembros integrantes de Generation Kill.

jueves, 20 de junio de 2013

ENTREVISTA MORPHIUM


Tras las buenas críticas cosechadas con "La Era De La Decadencia", los gerundenses MorphiuM regresan con su nuevo disco "Crónicas De Una Muerte Anunciada", un brillante trabajo en el que el sexteto desarrolla todo el potencial mostrado en su primera obra. Para darnos más detalles del disco, y hablarnos de sus planes más inmeadiatos, su vocalista Alex Bace se sometío al cuestionario de Rockeandobcn.

lunes, 17 de junio de 2013

ENTREVISTA SAD EYES


“9h0b1a”, es el segundo trabajo de Sad eyes, el proyecto personal de Santi Gzlez, un ambicioso lanzamiento en el que el guitarrista soriano nos ofrece su personal visión sobre la música extrema, contando para ello con la colaboración de algunos de los mejores guitarristas de la escena nacional. Para darnos todos los detalles de esta nueva entrega, y ponernos en antecedentes de lo que nos vamos a encontrar en este nuevo trabajo, Rockeando se puso en contacto con la mente creadora de Sad Eyes para sonsacarle todos los detalles de este atractivo proyecto musical.

EL BRUTAL ASSAULT ENGRANA SU MAQUINARIA CON UN CARTEL DE LUJO





Año tras año, el Brutal Assault se ha ido configurando como una alternativa a tener muy en cuenta en el panorama de los festivales europeos de verano. Su mejor baza, un cartel repleto de importantes nombres, una capacidad mediana y cómoda de asistentes, unos precios económicos, una buena organización y un entorno privilegiado.
Una vez más, la 18a. edición del Brutal Assault se llevará a cabo del 7 al 10 de agosto en la vieja Fortaleza militar de Josefov en la República Checa. Su cartel, especializado, aunque no únicamente, en la música extrema, congregará durante 4 días más de 75 bandas internacionales de diferentes géneros del metal, en dos escenarios principales adjuntos (cuyas actuaciones se van alternando sin solaparse) y otro secundario.
Por el momento, encabezan la lista de bandas principales grupos como Anthrax, In Flames, Opeth, Meshuggah, Behemoth y Fear Factory. Hasta la fecha, con el cartel todavía no cerrado, están confirmadas las actuaciones de:
ABORYM – AETERNUS – ALCEST – AMORPHIS – ANTHRAX – ANTROPOFAGUS – AS I LAY DYING – ATARI TEENAGE RIOT – BEHEMOTH – BELPHEGOR –BENEDICTION – BIOHAZARD – BORKNAGAR – BROTHERHOOD OF THE LAKE –CARCASS – CARPATHIAN FOREST – CENTURIAN – CLAWFINGER – COFFINS – CONTRASTIC – CRUSHING CASPARS – CULT OF LUNA – DECREPIT BIRTH – DEVILDRIVER – D.R.I. – DOWNSET – DR. LIVING DEAD – DYING FETUS – EMMURE – ENSIFERUM – ENTOMBED – FEAR FACTORY – FIELDS OF THE NEPHILIM – GLORIOR BELLI – GOJIRA – HATE – HATEBREED – IHSAHN – IN FLAMES – JUNGLE ROT – KATALEPSY – KILLING JOKE – LEPROUS – LOUDBLAST – MADBALL – MAGRUDERGRIND – MALEVOLENT CREATION –MARDUK – MESHUGGAH – MISANTHROPE – NOVEMBERS DOOM – OBSCURA – OCTOBER FILE – OPETH – ORPHANED LAND – OVERKILL – PRIMORDIAL – PROP-PAIN – ROTTEN SOUND – SATURNUS – SKELETAL REMAINS – SOLEFALD –– SYLOSIS – TESTAMENT – TRIVIUM – VOIVOD – VREID – WE BUTTER THE BREAD WITH BUTTER – WHITECHAPEL

Josefov se encuentra a 130 kms. de Praga. El peculiar emplazamiento, con una atmósfera única e histórica, es parte integral de la imagen del festival. El festival contará también con numerosos puestos de bebida que ofrecerán, entre otras cosas, cinco variedades de cerveza autóctona, y todo tipo de oferta gastronómica para todos los gustos y tendencias. También se contará con un amplio stand de merchandising oficial, así como un Metal Market con más de 60 tiendas de ropa y música. También se habilitará un “Horror Cinema House” con proyecciones diarias de películas de terror de serie B.

Otros espacios son el “Greenfield”, para poder descansar tranquilamente y tomar un respiro musicalmente hablando, y el “Natural Stand”, una pequeña colina justo en frente de los dos escenarios principales que permite ver los conciertos sentados y de forma más tranquila, con cobertura de sonido propia.
La zona de camping está justo al lado de la zona de conciertos, a escasos 300m. Se incluye la variedad de “VIP Camp” con uso exclusivo de lavabos privados y vigilancia de 24 horas. El festival no cuenta con parking propio para vehículos aunque se puede aparcar a los alrededores del pueblo o a las afueras.

La capacidad del recinto es de 15.000 personas. Más información en www.brutalassault.com y los siguientes canales:

/www.youtube.com/brutalassaultfest


viernes, 14 de junio de 2013

SACRED GATE-TIDES OF WAR



La pareja formada por el guitarrista Nicko Nikolaidis y el vocalista Jim Over parece que están muy inspirados últimamente. Si hace poco más de un año ponían en circulación el debut de su nuevo proyecto Sacred Gate  "When Eternity Ends", un  trabajo  repleto de heavy metal, muy influenciado por el sonido de bandas clásicas como Iron Maiden, Judas Priest y demás formaciones integrantes de la N.W.O.B.H.M.; en su nueva entrega, el conceptual "Tides Of War", el quinteto alemán  nos propone un notable endurecimiento de su propuesta, facturando 10 nuevas composiciones  en las  que sin abandonar sus primigenias influencias  se han decantado por dar  una vuelta de tuerca a su estilo tradicional, dando cabida a una sonoridad y unas estructuras más cercanas al power metal  practicado por bandas como Grave Digger o Iron Savior.

martes, 11 de junio de 2013

ENTREVISTA HYDE ABBEY




La cantera del metal nacional parece inagotable. Dos años después de su brutal debut "Hall Of Shame", los catalanes Hyde Abbey, regresan con su sorpresivo nuevo trabajo "Ooparts", una rotunda colección de death core salpicado de temática ocultista y conspiranoica, que hará las delicias de los paladares más exigentes y extremos de los seguidores del metal nacional. Para que nos expliquen cómo se fraguo este nuevo trabajo Rockeandobcn se puso en contacto con ellos.

viernes, 7 de junio de 2013

SONISPHERE 2013-BARCELONA-1 DE JUNIO-2013



Tras varios años de ausencia, la caravana itinirante del festival Sonisphere volvia a atracar nuevamente en tierras catalanas. Si en la anterior encarnación del festival en la Ciudad Condal, los cabezas de cartel fueron los americanos Metallica, para esta nueva edición, la organizacion se  decidio  a apostar por una de las bandas insignias del heavy metal europeo, los míticos Iron Maiden. Junto al legendario sexteto británico, formarían otros nombres destacados como los americanos Anthrax y Megadeth como representantes del thrash metal, y la nueva formacion del legendario  ex-bajista de  Metallica Jason Newsted.

Como sabia nueva, y jugoso aperitvio antes de la salida de los nombres mas populares y consagrados, teniamos programada la presencia sobre las tablas de los roqueros Voodoo SIx, los punk- industriales October File y los stoner Red Fang.

Representando al metal nacional contabamos con la participacion de los riojanos Tierra Santa, quienes se presentaban con illusiones renovadas y dispuestos a convencer a la audiencia de la calidad de sus nuevas composiciones. Tampoco podian faltar los aires retros y satanicos de los suecos enmascarados Ghost. Y como fin de fiesta absoluta, el proyecto personal del vocalista de Edguy, Tobias Sammet quien se presentaba por primera vez en tierras catalanas con una amplia nomina de invitados, que serían los encargados de dar brillo y esplendor a su actuación.

VOODOO SIX

Los encargados de abrir esta nueva edición del festival Sonisphere en tierras catalanas eran los británicos Voodoo Six. El quinteto londinense se presentaba abalado por el bajista de los cabezas de cartel, quien se había deshecho en elogios ante la propuesta de la banda. Ante tales expectativas, unos cuantos centenares de valientes se atrevieron a desafiar el tórrido sol de sobremesa, congregándose a las tres de la tarde para presenciar su show.


Con mucho ritmo y unas enormes ganas de agradar a la escasa audiencia que se dio cita para seguir su actuación, el quinteto londinense arrancaba su descarga con el contundente hard rock de raíz clásica contenido en cortes como “Falling Knives” o el pegadizo “Sink Or Swim”, ambos incluidos en su última entrega “Songs To Invide Countries To”, consiguiendo arrancar los primeros aplausos de un público con muchas de fiesta y diversión.



Aunque no dispusieron de mucho tiempo ni de un sonido especialmente nítido, lo cierto es que el quinteto supo sacar el máximo partido a sus escasos treinta minutos de show, consiguiendo recabar el apoyo de las primeras filas durante el marchoso “Take The Blame”, el contagioso  “Your Way”,  o la final “Long Way From Home”, facturando una actuación vistosa y entretenida en la que destacó por encima de sus compañeros, el simpático  bajista Tony Newton.

OCTOBER FILE


Uno de los grandes atractivos de los macro festivales veraniegos es la constante mezcolanza de estilos que conviven en ellos. Si los encargados de abrir la jornada nos habían ofrecido una descarga de hard rock de corte clásico, los siguientes en tomar las tablas, los también británicos October File, venían dispuestos a hacernos saltar con su poderoso punk metal impregnado de pinceladas industriales.

Aunque el cuarteto lleva bastante tiempo sin editar disco nuevo, la banda se mostró muy sólida durante su corto e intenso show, ofreciéndonos un gran derroche de potencia y entrega física sobre las tablas personificado, especialmente, en la figura de su vocalista Ben Hollyer, que no paró de moverse como un poseso sobre el escenario, incitando a la audiencia a saltar y levantar los brazos siguiendo el ritmo de sus trepidantes canciones.

A pesar de los fallos técnicos y alguna anomalía sonora, el cuarteto supo cuajar una actuación de lo más compacta y  convincente, dando a conocer temas como “Falter”, un incisivo y arrebatador “Crawl”, o un poderoso “Isolation”, que fue el encargado de dar por cerrada su actuación.

Pese a que quizás el estilo de October File no era el más apropiado para los seguidores de los cabezas de cartel, creo que  los británicos supieron rentabilizar su tiempo al máximo, desplegando todo su potencial sobre las tablas y consiguiendo pescar entre los asistentes  algún nuevo adepto para su causa.

RED FANG

El primer plato fuerte de la tarde llegaba con la actuación de los americanos Red Fang, que con su potente mezcla de heavy metal y sonido stoner consiguieron congregar a bastante gente para seguir su actuación. Muchos de los presentes venían atraídos por la curiosidad de ver como se lo curraban en directo esta panda de “colgaos” que hacen unos videos tan disparatados como divertidos.

Desde la edición de su último trabajo “Murder The Mountains”, los de Porland no han parado de tocar en directo, con lo que la propuesta del cuarteto se ha ido tornando cada vez más compacta y agresiva.

Para esta nueva descarga en tierras catalanas, la formación americana preparó un set muy equilibrado en el que dieron cabida a las mejores composiciones de sus dos obras de estudio.


Aunque a priori la propuesta de los de Porland parece más encaminada a salas de pequeño aforo, el cuarteto supo desenvolverse a la perfección dentro de un escenario tan grande y a plena luz del día, consiguiendo enganchar a la audiencia con los  riffs gruesos y aplastantes de temas como “Malverde”, “Into The Eyes” o un soberbio “Hank Is Dead”, que hicieron sacudir  la cabeza violentamente a más de uno.

Tampoco quisieron olvidarse de algunas de las gemas contenidas en su álbum homónimo de 2009, del que desgranaron cortes como el aplastante “Sharks” y un mastodóntico y turbulento “Prehistoric Dog”, que fue el encargado de poner el punto y final a su abrumadora actuación.


TIERRA SANTA

Los riojanos Tierra Santa se presentaban como los portadores  del estandarte del metal nacional. Habiendo sido el blanco de numerosas críticas tras la edición de su último trabajo “Mi Nombre Sera Leyenda”, la banda liderada por el vocalista y guitarrista Angel San Juan  saltaba a escena dispuesta a resarcirse, e intentar convencer a los más escépticos de la calidad  de  sus nuevas composiciones.

Pese a todas las adversidades, la banda tuvo que lidiar durante toda su actuación con un incómodo viento que provocó que el sonido fuera de los peores de toda la jornada, Tierra Santa demostraron que siguen conservando el cariño y el tirón de su púbico, sintiendo el respaldo incondicional de sus seguidores al encarar temas clásicos como  “La Sombra De La Bestia” o el grandísimo “Indomable”, que hizo levantar muchos puños al aire.

Mucho menos efusiva y bastante más tibia fue la respuesta que obtuvieron al presentar  sus temas más recientes como la inicial “Mas Allá de la Vida” o el single de presentación de su nuevo trabajo “Héroe” , con los que la banda no llegó a conectar plenamente con la audiencia.

Aunque sin duda lo más destacado de la actuación de los riojanos fue una trepidante recta  final con temas como la emocionante “Una Juventud Perdida”, un coreadísimo y animado “Legendario”, con Rober animando a sumarse a la fiesta al respetable, y una poética y emotiva “La Canción Del Pirata”, con el mar Mediterráneo de fondo, y gran parte del público recitando el inmortal poema de Espronceda.

En resumen, un concierto algo frio de los únicos representantes españoles en esta nueva edición del Sonisphere. Seguramente un repertorio basado en sus temas más clásicos hubiera conseguido una mejor respuesta por parte de un público que se mostró un tanto apático con las nuevas composiciones de la banda.




NEWSTED

Después de un largo periodo apartado de la primera línea de la actualidad metalera, el que fuera bajista de  Metallica, Jason Newsted, parece que se ha decidido a embarcarse en un nuevo proyecto, usando como denominación para su  banda  su propio apellido.

Hace tan solo unos meses el carismático bajista presentaba su primer  Ep bajo el identificativo título de “Metal”, toda una declaración de intenciones sobre sus  planes de futuro. Tras grabar el mencionado EP, y acabar de cimentar una banda de plenas de garantías, el bajista ha decidido subirse a la caravana itinerante de Sonisphere para volver a visitar el viejo continente dando a conocer sus nuevas composiciones.

Músico respetado y carismático como pocos, el bueno de Jason salía a escena dispuesto a agradar y convencer a una amplia legión de curiosos que se acercaron a ver las evoluciones de toda una leyenda  del metal.

Pese a que durante su actuación no hubo ningún tema  que despuntara sobre el resto, hay que remarcar que la nueva formación del bajista sonó compacta y rotunda, arrollándonos con la contundencia sonora de trallazos como “Soldierhead” “Godsnake” o “As The Crow Flies”.

Vocalmente me pareció que Jason iba un poco justito, ya que su voz sonaba mucho más “rota” y forzada  que en el Ep, no sé si por voluntad propia, o porque tenía alguna clase de problema en la garganta, en cualquier caso, de cara al futuro, me imagino que aprenderá a  amoldarse mejor a los registros de sus grabaciones.

Además del material incluido en “Metal”, el bajista presentó alguno de los nuevos cortes que formaran parte de su inminente nuevo trabajo como el brillante “Long Time Death”, una  explosiva combinación  entre la velocidad de  Motorhead y el sonido stoner, que pareció agradar bastante a la audiencia, o un incisivo “Heroic”, durante el que el bajista no cesó de arengar a la “familia metalera” mientras hacía cuernos.

Tampoco faltó algún pequeño recuerdo hacia sus ex compañeros, como el amago del “Creeping Death” en el  tramo final de “Kings Of The Underdogs”, o el apabullante “Wiplash”, con el que la gente se volvió literalmente loca. Curiosamente fue Jason el primero de los artistas en ofrecernos un bis, en este caso  un lento y oscuro “Nocturnus”, que  fue el encargado de cerrar su show, dejando unas buenas sensaciones entre los asistentes.




GHOST

Precedidos por el halo de misterio que provoca el anonimato de los componentes de la formación, Ghost se presentaban a plena luz del día liderados por su carismático vocalista Papa Emertius II, preparados para  someternos a su particular liturgia satánica, mezclando para ello, una sonoridad clásica del rock de los sesenta y esas cautivadoras pinceladas de oscuridad y dramatismo de las que están impregnadas sus composiciones.

Sin duda, el hecho de tocar a plena luz del día no jugo a favor de la propuesta de la formación sueca, pero este detalle no debe servir para justificar una actuación más bien floja.

A pesar de lo acertado de su repertorio, en el que alternaron los mejores cortes de sus dos trabajos discográficos, lo cierto es que su descarga, a diferencia de la que ofrecieron en la edición madrileña del año pasado, fue bastante plana y lineal.

Un sonido bastante decepcionante, y la dificultad para escuchar con claridad la voz del Papa Emertius II deslucieron notablemente la descarga de los suecos, haciendo que los primeros compases de su actuación con temas como “Per Aspera Ad Inferi” o el sinuoso “Con Clavi Con Dio”, sonaran bastante deslavazados y faltos de fuerza.

A medida que fue avanzando su actuación la cosa fue mejorando ligeramente, consiguiendo que temas como la fantasmagórica “Stand By Him” o  el  invocador “Year Zero”, sonaran algo más potentes, pero en ningún momento, sus argumentos sonoros  consiguieron  convencer a una audiencia que prefirió ir a refrescarse ante la inminente salida de los cabezas de cartel. 

En resumen, una actuación decepcionante de una banda que venía precedida de una gran aureola, y que personalmente, me resulto bastante corriente. De su actuación, únicamente salvaría su brillante puesta en escena, con todos sus miembros perfectamente uniformados con sus hábitos de moje,  y un pegadizo “Ritual”, con el que despidieron su actuación ante la indiferencia generalizada de la audiencia. 





IRON MAIDEN


Tras haber tenido que desplazarme para ver las últimas giras de la Doncella, resultaba todo un privilegio tener la posibilidad de volverlos a disfrutar dentro de la Ciudad Condal. Habiendo visto a la formación en múltiples ocasiones se me antojaba bastante difícil que la banda pudiera llegar a sorprenderme, pero esta vez lo consiguieron.
 
El planteamiento de la actual gira de Iron Maiden está claro, rememorar la época y la gira del popular video MAIDEN ENGLAND. Para tal efecto, la banda no ha escatimado ni el más mínimo detalle recuperando para la ocasión  un escenario muy similar al de aquella gira, con dos niveles de altura y unas amplias pasarelas laterales en la parte superior. Además, también han rescatado las pantallas laterales y centrales sobre la que se harían las proyecciones de la introducción, y que servirían para poder seguir las evoluciones de los músicos.
 
Pese a que a la hora fijada para el inicio del show todavía había mucha claridad, la banda nos tenía preparado un gran despliegue de recursos luminotécnicos, apostando por una iluminación basada en tonalidades azules, verdes y rojas, que serían las encargadas de ambientar el escenario junto a unas altísimas columnas de fuego y un gran despliegue pirotécnico.
 
Tampoco podían faltar a su reencuentro con el público catalán, los diferentes Eddie´s que fueron desfilando durante la actuación por el escenario, llegando a interactuar con los músicos en algunos temas; e incluso una enorme representación del macho cabrío presidiendo el escenario durante la ejecución del mítico “The Number Of The Beast”.
 
Tras una larga y tensa espera, la euforia del público se desataba al reconocer los primeros compases del  “Doctor Doctor”, que nos ponía a todos en sobre aviso sobre la que se nos venía encima. Tras tararear todos al unisonó el inmortal clásico de U.F.O., (convertido ya en sintonía de inicio de las descargas de Maiden), se encendían las pantallas mostrándonos unas impactantes imágenes del deshielo polar acompañadas de una sintonía apocalíptica que desembocaría en la familiar intro de “Moonchild”. Acto seguido, llegaba la primera gran explosión de la noche, tras la que los componentes de la banda aparecieron en escena tan majestuosos y activos como siempre, ocupando el nivel inferior, mientras Dickinson se adueñaba del nivel superior  comandando la nave a la vez que divisaba a la muchedumbre congregada frente al escenario.
 
Sin tiempo para reponernos del impacto inicial, llegaba el turno de una celebradísima y coreadísima “Can I Play With Madness”, con el vocalista ya formando junto al resto de sus compañeros demostrando sus grandes dotes como frontman, incitando a participar a la audiencia en unos coros que sonaron realmente ensordecedores.
 
Con el vocalista posicionado entre los monitores centrales pidiendo los gritos de apoyo  del respetable daba arranque el primero de los rescates de la noche, un hímnico “The Prisioner”, que fue el escogido por Bruce para obsequiarnos con los primeros “Screaming From Me Barcelona” de la noche, provocando el delirio de un entusiasmado público. Si a estas alturas el personal ya estaba completamente entregado a la banda, la locura más absoluta se adueñó del recinto al reconocerse los primeros compases del trepidante “2 Minutes To Midnight”, en los que pudimos observar las dificultades de Bruce para llegar a los tonos más altos, una carencia que el vocalista supo suplir con una gran entrega física.
 
La primera charla de la noche servía para hacernos recobrar  el aliento antes de que la formación británica nos embarcara dentro de un hipnótico y arrebatador “Afraid To Shoot Strangers”, con toda la banda sonando como si de una orquesta se tratara, melódica, compacta, sólida y tremendamente precisa, con Janick, Dave y Adrian, entrelazando sus armonías acompañando a un Dickinson que nos ofrecía su faceta más teatral, dando más empaque y consistencia a la composición. Unos sutiles toques de la batería de Nicko McBrain nos  anunciaban la llegada de uno de los puntos álgidos de la noche “The Trooper”, que puso a toda la audiencia a botar exaltados por un Dickinson  uniformado con la clásica casaca roja que hondeaba incansablemente su bandera.
 
Con el ambiente ya plenamente caldeado llegaba el momento de escuchar uno de los clásicos absolutos dentro de la discografía de la banda, un coreadísimo “The Number Of The Beast”, para el que contaron con una  figura del macho cabrío, que emergió desde el fondo del escenario junto a unas espectaculares columnas de fuego que se reavivaban con la llegada de los clásicos “Six, Six, Six”. A pesar de la excelente colección de clásicos que sonaron durante la actuación de los británicos, no creo equivocarme al comentar que uno de los momentos más emocionantes para muchos de los presentes, especialmente para los fans más veteranos, fue un trepidante “Phantom Of The Opera”, en la que la tripleta de guitarristas volvió a dejarnos un fiel testimonio de su calidad técnica y nivel de compenetración.
 
Una apoteósica “Run To The Hills”, fue la encargada de dar continuidad a la velada con un Dickinson que corría sin descanso de un lado al otro aprovechando al máximo las pasarelas laterales de la parte superior del escenario, mientras que el nivel inferior era tomado al asalto por un gigantesco Eddie blandiendo un sable, desatando una euforia que tendría continuidad con uno de los temas más queridos por todos los fans de la banda “Wasted Years”, en el que como no podía ser de otra forma, brilló especialmente su compositor Adrian Smith.
 
Tras una monumental ovación llegaba el momento más memorable de la noche, un apoteósico “Seventh Son Of A Seventh Son”, más de diez minutos de auténtico deleite musical,  enmarcados dentro de una cuidada escenografía compuesta por  un Eddie vidente  flanqueado por dos antorchas. Tampoco faltó la  presencia de unos fantasmagóricos teclados qué acabarían desapareciendo por el lado derecho del escenario. Además de la impresionante puesta en escena, la canción se vio redondeada por una fantástica interpretación a cargo de un fabuloso Dickinson, que ataviado con una gabardina azul, convirtió la pieza en un acto operístico, dándole una grandilocuencia y dramatismo que consiguió emocionar a muchos de los asistentes.
 
Tras unos escasos segundos, que sirvieron para sacarnos del aturdimiento generalizado, eran las cuatro cuerdas de Steve Harris las encargadas de marcar el familiar ritmo de “The Clairvoyant”, que volvería a poner a toda la audiencia a botar, para posteriormente dejar paso a un pletórico “Fear Of The Dark”, que fue espectacularmente recibido por una audiencia que coreo cada una de las líneas vocales consiguiendo crear un ambiente realmente sobrecogedor.
  
Antes de que el sexteto abandonara el escenario, aún tuvimos tiempo para un abrumador “Iron Maiden”, con sus habituales juegos y cánticos. Sorpresivamente, mientras todos permanecíamos atentos a la entrada de Eddie sobre las tablas, el séptimo miembro de la banda emergió desde las profundidades del escenario reproduciendo la portada del mítico “Seventh Son Of A Seventh Son”.
 
No se hicieron de rogar en exceso a la hora de volver sobre las tablas para abordarnos con una tripleta realmente demoledora.  Un galopante “Aces High”, que quedó un tanto deslucido por la dificultad de Dickinson para alcanzar las notas más altas, fue la antesala perfecta para una arrolladora “The Evil That Men Do”, que volvió a hacer rugir estruendosamente el recinto del Forum, para acabar poniendo la guinda a su soberbia actuación con un marchoso “Running Free”, que todos cantamos como si nos fuera el alma en ello.
 
Tras presenciar la descarga de Maiden, creo poder asegurar que,  el montaje y la producción de esta nueva gira es el más completo y ambicioso de los últimos veinte años. Quizás un sonido algo falto de potencia y un Bruce un escalón por debajo del nivel al que nos tiene acostumbrados fueron los dos únicos lunares de una actuación realmente memorable.


ANTHRAX


Una vez finiquitada la descarga de Iron Maiden, el recinto del Fórum se preparaba para acoger a la primera de las dos bandas que descargarían esta noche como representantes de ese legendario “Big Four” del thrash metal americano.

La actuación de Scott Ian y sus muchachos fue de auténtica traca. Aunque a tenor de las noticias que han ido apareciendo en la prensa, podría parecer que la formación neoyorquina no está atravesando su mejor momento, con constantes bajas temporales de algunos de sus miembros,  y pese al  reciente abandono de su guitarrista Rob Caggiano, lo cierto es que Anthrax se reivindicaron como una de las bandas clásicas del género, pasando como un auténtico vendaval sobre las tablas y dejando una magnífica impresión entre todos los que presenciaron su incendiaria actuación.

Con un escenario muy sobrio, un sonido tremendamente potente, (más amenazante que el de los propios Maiden), y un set-list muy bien escogido para la ocasión, rescatando temas de casi todas sus épocas, los neoyorquinos saltaban al escenario con el cuchillo entre los dientes dispuestos a arrollaremos con el portentoso a "Among The Living", con el quinteto pisando el acelerador al máximo, mientras que un fantasmagórico y carismático  Belladona se metía al público en el bolsillo con sus poses clásicas de los 80, manteniéndose bien aferrado a su medio pie de micro. Siguiendo con su arrebatador repaso por su época más gloriosa, el siguiente cañonazo en caer fue un colosal "Caught In A Mosh", que dejo paso a un coreadísimo "I Am The Law", durante el que un animadísimo Frank Bello sacó su alma de animadora, ocupando el centro del escenario a la vez que  animaba incesantemente a una audiencia que estaba disfrutando de lo lindo.

Como sí de un viaje en el tiempo se tratase, la banda se plantaba en su más actual "Worship Music", para ofrecernos un reverencial " In The End", que relajó un poco el ambiente, cambiando la energía desmedida por la emoción, ya que el tema fue dedicado a la memoria de Ronnie James Dio y Dimebag Darrell, cuyas fotografías presidieron el escenario mientras Belladona no dejaba de repetir incansablemente el gesto que popularizo el pequeño "Elfo".

Tampoco quisieron dejar de lado su última entrega “Anthems”, en forma de EP de versiones, del que rescataron un marchoso "T.N.T." del que me sorprendió  muy gratamente la manera de encarar el tema de  Belladona,   que supo hacer suyo el corte,  respetando el espíritu original de la canción de los australianos.

 El retorno a su material más clásico vino de la  mano de una aclamada "Indians" que puso a todo el mundo a botar, antes de que la banda se abalanzara sobre un nuevo cocer, en esta ocasión, la elegida sería el tema de Joe Jackson "Got The Time". Sin dejarnos tomar aliento, llegaba el momento de una nueva visita a su "Worship Music" de la mano de un corrosivo "Fight' Em ´Till You Can´t" que nos adentraba irremediablemente en el tramo final de su actuación.
 
Si previamente, la banda ya había rendido su particular homenaje a Dio y Darrell, fue durante el cachondo y marchoso "I´m The Man", cuando  tuvieron el bonito detalle de introducir un fragmento del clásico de Slayer "Raining Blood", a modo de homenaje al recientemente fallecido Jeff Hanneman. Con todo el   público entregado, era el momento de la despedida y que mejor elección que un potente  y disparatado "Antisocial" que puso a todo el mundo a saltar consiguiendo poner un fantástico broche a una brutal actuación.

Tras poco más de una hora de show, los neoyorquinos demostraron que siguen estando en un gran momento de forma, con un fantástico Jon Donais como nuevo guitarrista que se mostró  perfectamente acoplado al engranaje de la banda  y un repertorio realmente arrollador, en el que siendo un poco crítico, quizás habría sacado alguna versión para dar cabida a alguno de sus inmortales clásicos como por ejemplo "Madhouse" o “Efilnikufesin (N.F.L.). En cualquier caso,  la actuación de Anthrax, fue una de las mejores de esta edición del Sonisphere 2013.


MEGADETH




Con la noche ya bien entrada, era  el turno de otro de los platos fuertes de esta nueva edición del Sonisphere, los americanos Megadeth. Una banda con una larga trayectoria a sus espaldas, y una gran legión de seguidores en nuestro país; es por ello, que muchos fueron los que no quisieron perderse las evoluciones de Dave  Mustaine y sus muchachos.

Tras la aplastante descarga de los Neoyorquinos Anthrax, los técnicos del equipo de Megadeth tomaron el escenario para montar unas vistosas pantallas, sobre las que se irían proyectando diferentes imágenes y efectos visuales, que darían a la descarga del cuarteto americano una ambientación de lo más futurista.


Finalmente cuando todo estuvo listo, una desconcertante introducción fue la encargada de marcar  la sobria entrada de los músicos sobre las tablas, siendo el último en aparecer en escena Dave Mustaine, para arrancar su descarga de forma lenta y sosegada con un envolvente y dramático “Trust”.

Tras la  primera toma de contacto, se dispararon las revoluciones de banda y público al comenzar a sonar  los primeros riffs de una incendiaria “Hangar 18”, que nos supo a gloria, con toda la banda rindiendo a gran nivel mientras las pantallas no dejaban de mostrar impactantes imágenes. La anécdota de la jornada la protagonizó el propio Mustaine, quien  al final del tema espetó un sonoro “Gracias, Madrid”,  que provocó el lógico silbido del público, y la rápida disculpa y rectificación del guitarrista, que paso un mal rato ante tal “gambazo”.

Con su nuevo trabajo “Super Collider” a punto de salir al mercado, la banda no quiso desaprovechar  la ocasión para ofrecernos una pequeña degustación del mismo, adelántanos un marchoso “Kingmaker”, que enfrió un poco los ánimos del respetable. Rápidamente el ambiente volvería a remontar gracias a  la velocidad riffera de una incisiva “She-Wolf”, que pondría a todos los asistentes a tararear sus pegadizas armonías.

Durante toda la actuación de los americanos, se pudo ver a un Mustaine un tanto indolente, que no parecía acabar de encontrarse cómodo sobre las tablas, en cambio, sus compañeros se mostraron muy activos y participativos, especialmente Dave Ellefson que no dejo en ningún momento de animar y alentar al público, y un inspiradísimo Chris Broderick, que poco a poco, se ha ido consolidando como una pieza clave dentro del sonido de la  banda.

No faltaron durante la actuación de Megadeth, los momentos emotivos como los multitudinarios coros en la clásica “A Tout Le Monde”,  que sonó un poco descafeinada, ni tampoco el recuerdo a una de las piezas maestras de su discografía “Countdown To Extinction”, del que desgranaron cortes como el que da título al álbum, y un contundente y áspero “Sweating Bullets”, con el que hicieron las delicias de los fans más veteranos de la formación americana.

Un nuevo guiño a su material más reciente de la mano de la irregular  “Super Collider”, nos servía para tomar impulso de cara a la recta final de su actuación. “Symphony Of Destruction”, era la encargada de levantar nuevamente la moral de la tropa, antes de adentrarnos en un vertiginoso “Peace Sells”, que sonó realmente intenso y atronador, redondeando uno  de los mejores momentos  de su actuación, con las pantallas escupiendo imágenes bélicas mientras los músicos machacaban sin piedad sus instrumentos.

Con las pantallas reproduciendo una pared de amplificadores Marshall arrancaba la última de las canciones de la noche, un aclamadísimo “Holy Wars… The Punishment Due”, que fue el encargado de poner el definitivo punto y final a la descarga del cuarteto, no sin antes dejar que Mustaine nos presentara a sus compañeros de viaje, y volviera, de forma sincera, a pedir perdón por su lapsus inicial.

Sensaciones encontradas después de la descarga de unos Megadeth a los  que note un poco cansados y repetitivos, sin esa chispa y electricidad que siempre les había caracterizado en directo, echando mano  de un repertorio excesivamente previsible, y dejando de lado algunos de sus más impactantes clásicos como “Tornado Of Souls” , “In My Darkest Hour” o “Skin O´My Teeth”.


AVANTASIA




Tras una maratoniana jornada de conciertos, el cansancio acumulado empezaba a hacer mella entre muchos de los asistentes, lo que propicio que gran parte del público diera por concluida esta edición  del Sonisphere 2013, al concluir  la irregular actuación de Megadeth. Pese a ello, una nutrida legión de seguidores optaron por aguantar el tirón, como auténticos valientes, para poder degustar de primera mano el fantástico espectáculo que nos ofrecía el diminuto vocalista Tobias Sammet y su caravana itinerante de Avantasia.

El retraso acumulado durante toda la jornada, y el montaje de la escenografía para la actuación de la formación alemana, propiciaron que el inicio del show se retrasara ligeramente, dando inicio sobre las dos de la madrugada.


Según los detalles que se habían ido filtrando de su concierto madrileño, para esta serie de presentaciones en territorio español, el vocalista contaba con la presencia en escena de invitados de contrastada calidad como por ejemplo Eric Martin (Mr.Big), Michael Kiske (Unisonic), Bob Catley (Magnum) y Ronnie Atkins (Pretty Maids), además de los  miembros habituales de la banda Sascha Paeth, Felix Bohnke, Olive Hartman, Thomas Rettke, Miro y la angelical Amand Somerville. Ante tal despliegue de estrellas, la actuación de Avantasia se presentaba  como una autentica constelación de estrellas.

La encargada de abrir fuego, fue la pieza que marca el arranque de su última entrega discográfica “Mistery Of Time”, “Spectres” que servía para que Sammet, como maestro de ceremonias, nos diera la bienvenida y nos agradeciera efusivamente nuestra paciencia y entrega a horas tan tardías. A diferencia de anteriores visitas con Edguy, el vocalista se mostró muy potente y resolutivo, aunque continuo haciendo gala de un gran sentido del humor. En cuanto al sonido de la banda, lo cierto, es que fue realmente bueno, incluso me atrevería a decir que mucho más nítido y potente que durante la actuación de Maiden.

Tras la primera toma de contacto, el concierto se convirtió en un constante desfile desfile de invitados, que fueron los encargados de dar lustre y brillo a una monumental actuación. El primero en salir a escena junto al propio Sammet fue un inspirado Ronnie Atkins para marcarse un potente “The Sacrecrow”, que con sus aires folk convirtió el recinto en una auténtica fiesta. Sin tiempo más que para unas escuetas presentaciones, Sammet se embarcaba en una preciosa y sentimental “The Story Ain´t Over”, para la que contó con la clase y la elegancia de un  Bob Catley que se mostró realmente sublime durante todas sus intervenciones.

Pero indudablemente, si hubo un vocalista que consiguió hacer explotar al público barcelonés, este fue el mítico Michael Kiske, que bordó su intervención en temas clásicos, como el primerizo “Reach Out For The Light” o “Breaking Away”, donde protagonizo unos intensos duelos con su alumno aventajado, rindiendo ambos a un gran nivel, ofreciéndonos sus tonalidades mas agudas; para dejar paso a un emotivo "Farewell", en el que Kiske compartio las labores vocales con Amanda Somerville.

Otro de los grandes reclamos de esta primera visita de Avantasia por tierras catalanas fue la presencia del vocalista de Mr. Big, Eric Martin que con su figura de eterno adolescente, fue el encargado de hacerse cargo de las líneas vocales de Klaus Meine de Scorpions durante una inspiradísima “Dying For An Angel”. Con Tobias cediendo todo el protagonismo a sus invitados, era el propio Martin y el potente Atkins los encargados de liderar la formación durante una tortuosa “Twisted Mind”, durante la que el veterano Atkins se adueñó del escenario, consiguiendo meterse a toda la audiencia en el bolsillo con su potente interpretación y sus grandes maneras como frontman.

Haciendo gala de su peculiar sentido del humor, Sammet regresaba sobre las tablas para anunciarnos una próxima venida de la banda, en la que podremos disfrutar íntegramente del show completo de la formación, para posteriormente presentarnos el tema más comercial de la formación, su single por antonomasia “Lost In Space”, durante el que el vocalista puso a mover a todo el público las brazos, recreando una estampa que todos hemos visto en los grandes festivales europeos. La recta final de la actuación vino marcada por el retorno de Catley y Kiske para un arrollador “Shelter From The Rain” que precedería al apoteósico “Sign Of The Cross”, para que finalmente, todos los músicos tomaran la parte central del escenario para cantar al unísono un brillante “The Seven Angels” que fue el encargado de cerrar la actuación ante el aplauso reverencial de una audiencia totalmente entregada.

En resumen, la de Avantasia fue la guinda de una gran jornada de metal. Sin duda, una de las mejores actuaciones de toda la jornada, repleta de buen gusto y calidad musical. El único pero, fue lo tardío de su aparición y que no pudimos disfrutar del grandilocuente show de casi tres horas que la formación está ofreciendo en su gira de pabellones. En cualquier caso, esta presentación nos sirvió de aperitivo, ya que el propio Sammet manifestó su férrea voluntad de volver a tierras españolas para presentarnos el montaje completo de su banda.

Tras una maratoniana jornada de conciertos, cuando el reloj sobrepasaba ampliamente las tres de la madrugaba, llegaba el momento de tomar el camino de vuelta a casa, pensando en el buen regusto de boca de una jornada que nos deparo muchísimas sorpresas y grandes momentos, que muchos de los asistentes guardaran para siempre en su recuerdo. Como pensamiento positivo, cabe recalcar que ya solo falta un año para la edición del Sonisphere 2014.