Tras haber compartido escenario con nombres y bandas tan populares como Ted Nugent, Cheap Trick, The Barons, L.A. Guns, Dio..., y siendo un pilar importante de la banda que acompaña al mítico e incombustible Alice Cooper durante las dos últimas décadas, el bajista Chuck Garric decidió unir fuerzas con el guitarrista Chris Latham para poner en marcha en 2012 su propio proyecto bajo la denominación de Beastö Blancö. Poco después llegaría un aplastante debut bajo el definitorio título de “Live Fast, Die Loud”, contando para acompañarles en las voces con la propia hija de Mr. Furnier: Calico Cooper, y al que siguió una gira que pasó por nuestro país, y que algunos tuvimos ocasión de ver en la intimidad del añorado Rocksound de la Ciudad Condal. La continuación no llegaría hasta 2016 con un álbum homónimo en el que la banda mantenía intacta esa flema gamberra, macarra y netamente rockera aunque convenientemente adulterada con unas generosas dosis “de contemporaneidad”, haciendo que su propuesta fuera apta tanto para los fans más clásico como para los seguidores de las tendencias más vanguardistas dentro del rock/metal americano. Sin abandonar Garric y Calico su actividad junto a Alice Cooper la banda fue haciendo pequeñas giras consiguiendo afianzar su posición dentro de la escena internacional hasta publicar el pasado 2019 “We Are”, en el que si se notaba la apuesta por esa sonoridad más moderna e impregnada de guiños industriales.
