domingo, 21 de mayo de 2023

REYLOBO-INFINITO

 

Cuando una banda se estrena con un debut tan sólido y notable como fue “El Octavo Pecado”, que vio la luz en 2019, se está poniendo un duro reto de cara al futuro, ya que puede llegar a condicionar su carrera. Afortunadamente, los murcianos Reylobo no se han amilanado y de cara a la publicación de este segundo esfuerzo que lleva por título “Infinito”, - y para el que han vuelto a contar con los servicios tras los controles de Alberto Rionda-, han subido la apuesta a nivel compositivo, tanto en la faceta instrumental como a nivel lírico, ya que las letras del álbum completan una historia conceptual en la que se explican las desventuras y sentimientos de su protagonista “El hijo De Las Estrellas”, tras haber sufrido la pérdida de un ser querido. Además, por si no fuera suficientemente complicación hilvanar los temas para confeccionar una historia, muchas de las composiciones están inspiradas en diferentes libros, tal y como la propia banda ha detallado en una serie de vídeos que han ido colgando en su canal de YouTube.

Pero dejando a un lado el aspecto letrístico cabe remarcar que “Infinito”, nos muestra a una banda que sigue transitando la senda que ya perfilará en su ópera prima, aunque ahora el quinteto murciano suena mucho más maduro y personal, poniendo un mayor énfasis a la hora de atacar los pasajes más duros y cañeros, pero a su vez mostrándose más elegantes y sofisticados durante los desarrollos más melódicos. Para ello sin duda ha sido fundamental que se haya mantenido el line-up que conforman el vocalista Nacho Fernández, el bajista Wenceslao Miralles, el guitarrista Pedro Gallego, el teclista Miguel Terralba, y al que ahora se suma el batería Guillermo Barranco, “Momo”. Algo que ha reforzado la entidad y personalidad de la formación murciana. Once son las composiciones que completan “Infinito”, y en ellas además de poder apreciar la calidad que ya apuntaban en su ópera prima, Reylobo han potenciado todas esas virtudes consiguiendo llevar su propuesta un paso más allá. Y eso precisamente es algo que podemos percibir desde la inicial “Lux Aeterna”, en donde la melodía será el motor conductor del tema. Eso sí, muy bien respaldada sobre una dinámica sección rítmica y esos omnipresentes teclados, que por momentos pueden percibirse en primer plano o empastados con el el resto de instrumentos. Aunque donde la banda sigue conservando una de sus particulares señas de identidad es en el aspecto vocal, con un Nacho Fernández, que despliega todo su potencial melódico, sin cortarse en ningún momento a la hora de subir tonos. Y es que profundizando en el tratamiento de las voces, también llaman la atención esos coros que aparecen de forma puntual y que servirán para darle al corte un plus más de pegada. Esa senda melódica, de reminiscencias power, se mantendrá a lo largo de “Hijo De Las Estrellas”, que nos deja un estribillo pegadizo y coreable. Pero quien se lleva el gato al agua aquí es el guitarrista Pedro Gallego con un fantástico desarrollo solista.

Habiendo asentado las bases y, porque no decirlo, la apuesta sonora del quinteto de cara a esta segunda entrega toca barnizar su propuesta con esos toques que hacen que su material suene rico en matices y variado, contando además, -al igual que ya sucediera en su ópera prima-, con la participación de varios invitados. El primero en aparecer será el vocalista de Saurom, Miguel Franco, quien junto a Nacho se encargará de revestir de optimismo y luminosidad las deslumbrantes melodías de “Hidalgo”, amén de fraguar el que probablemente sea uno de los mejores estribillos de todo el álbum. Las atmósferas se tornarán más densas y hasta diría que oscuras para dejar que el siguiente invitado, Leo Jiménez, le dé un toque especial a “El Hambre”, que como decía nos muestra una cara diferente dentro de la propuesta de Reylobo, quizás no tan veloz, y si más centrada en desarrollar las inquietudes guitarreras y las propias estructuras del tema.

El violín de Valentín Miralles será el encargado de revestir de dramatismo los compases iniciales de “Duelo”, dejando que sean los teclado los encargados de conducirnos durante las estrofas junto a la rotunda pegada de la sección rítmica para acabar desembocando en un estribillo rotundo y de tintes épicos. Precisamente serán unos teclados impregnados de esencias setenteras los que nos introduzcan de lleno dentro de “En Las Fauces Del Lobo”, que destaca por las voces dobladas. Mención especial merecen los registros más agudos de Nacho, que dan al tema junto a la simbiosis entre potentes riffs y la elegancia de sus partes solistas un empaque y una personalidad que lo diferencian del resto de piezas del álbum.

No sé si será premeditado o no, pero lo cierto es que la alargada figura de Alberto Rionda puede apreciarse en las guitarras iniciales de “Valeria”, -el que fuera primer adelanto del disco, un tema muy especial ya que está dedicado a la memoria de la hija de “Momo”-, y en donde los murcianos dan rienda suelta a su vertiente más netamente melódica, destacando una vez más la labor de Nacho, sonando sofisticado junto al piano, aunque sin perder el punch y la garra a la hora de atacar las partes más dinámicas y directas de su pegadizo estribillo. La faceta más intimista e introspectiva de Reylobo quedará plasmada a largo de la delicada “Un Reflejo De Mí”, todo un derroche de sentimiento encuadrado en una ambientación de lo más sosegada que servirá para romper la dinámica del disco. Si has llegado hasta aquí te habrás dado cuenta que son muchos los elementos y recursos que Reylobo utilizan en su propuesta para hacer que cada tema sea diferente, único.., y que, en definitiva, destaque por algo en particular; aunque sin perder en ningún momento sus señas de identidad. Por ello me gustaría destacar un corte como “Universo”: rápido, directo, muy acorde con sus cánones habituales, pero en el que han incluido unos arreglos iniciales,- que se irán repitiendo a lo largo del tema, dandole al corte una orientación más vanguardista.

Muchos son los detalles y matices que acaban propiciando que podamos aseverar que “Infinito” está un paso por encima de su predecesor, y el dinamismo que nos proponen en las estructuras y desarrollos de “La Escalera De La Creación”, -que cuenta con la colaboración de Rafael Lazaro-, les servirá para volver a incidir en la fantástica simbiosis entre teclados y guitarras, y todo ello rematado por un fantástico estribillo en tonalidades altísimas. Una línea similar, -aunque concediendo un mayor protagonismo a las partes más sosegadas-, sigue “El Adversario”, poniendo el broche de oro a un trabajo que, como comenté anteriormente, posiciona a Reylobo tras ser una promesa de la escena nacional en toda una realidad, y en una banda a tener muy en cuenta de cara a los próximos años.


DISCOGRAFICA:CD MUSIC

Lista de Temas

  1. Lux Aeterna

  2. Hijo De Las Estrellas

  3. Hidalgo

  4. El Hambre

  5. Duelo

  6. En Las Fauces Del Lobo

  7. Valeria

  8. Un Reflejo De Mí

  9. Universo

  10. La Escalera De La Creación

  11. El Adversario

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