Un lustro
separa la edición de “Darkness Unbound” y “Chaos Manifesto”, el álbum que
marca la incorporación del vocalista Alexander Högbom, tras la
salida de Sverker “Widda” Widgren. Mucha curiosidad había suscitado el retorno
de DEMONICAL a la capital catalana, por lo que la Sala Upload acabó
registrando una aceptable entrada pese a estar programada la cita para un
jueves. A diferencia de lo que suele ser habitual cuando nos visitan bandas
internacionales, en esta ocasión como actos previos contaríamos con
el concurso de dos bandas catalanas: HYBAN DRACO y DESAFIANT.
Pocas
referencias tenía de los encargados de inaugurar la velada, así que una
rápida consulta en su facebook sirvió para captar mi atención, ya que los
gerundenses se presentan como la primera orquesta catalana de death metal. Ante
semejante definición un servidor no sabía muy bien que esperarse, pero lo
cierto es que su descarga acabó resultando una agradable sorpresa.
Sí,
evidentemente, DESAFIANT son una banda de versiones, pero su puesta en escena,
-con todos sus miembros elegantemente ataviados de riguroso negro y corbata; y
con su frontwoman luciendo un elegante vestido-, fue cuanto menos original.
Pero dejando a un lado el tema del vestuario, lo cierto es que el cuarteto, -ya
que su guitarrista Jordi Ramió fue baja de última hora-, nos propuso un show
dinámico, intenso y divertido.
Me gustó la
fidelidad con la que DESAFIANT ejecutaron temas clásicos como “Circle Of The
Tyrants” o “Blinded By Fear”, haciendo que los más animados les acompañaran a
la hora de sumarse al headbanging. Pero sin duda la gran animadora de su
presentación fue Judit Pons, quien no paró de saltar, bailar e incitar a
que nos sumáramos a la fiesta mientras castigaba sus cuerdas vocales en
temas como “So You Die”. Además también nos hicieron esbozar más de una sonrisa
con sus constantes demandas para que solicitáramos a nuestros
alcaldes su contratación para las fiestas municipales.
DESAFIANT
dejaron patente durante sus cuarenta minutos sobre las tablas que la
banda está compuesta por músicos solventes y con tablas. Uno de los pocos
temas que no llegó a convencerme fue “Corporeal Jigsore” de CARCASS, ya que
sonó algo desdibujado al ser tocado con sólo una guitarra. Pero, en cualquier
caso, los gerundenses acabaron dejando una muy buen impresión entre los
presentes, consiguiendo caldear el ambiente a base de trallazos incontestables
como “Suffer The Children”, “Inmortal Rites” y el
imprescindible homenaje a los Death del desaparecido Chuck Schuldiner con el
clásico “Evil Dead”.
Los siguientes
en ganar las tablas del escenario de la Sala Upload fueron HYBAN DRACO, quienes
aprovecharon la ocasión para ofrecernos un exhaustivo repaso a su última
entrega discográfica “Storms Of Deslotation”, que veía la luz a principios del
pasado año. Como en ellos suele ser habitual, el cuarteto de Alcanar hizo gala
de la solidez, rotundidad y aplomo que siempre les ha
caracterizado, desplegando su oscuro black metal salpicado de melodía y
pinceladas épicas.
El centro de
todas las miradas fue su vocalista y guitarrista, Hyban Sparda, quien se mostró
como el motor indiscutible de la banda desde que abrieron fuego con “Dark Sides
In Heaven” y “A Long Path”, esparciendo su manto de maldad, respaldándose en
sus desarrollos melódicos sobre la rotundidad de su base rítmica.
Tras habernos
dado una buena muestra del potencial de sus nuevas composiciones tocaba echar
la vista atrás para recuperar uno de los temas de su segundo largo “God Of
Darkness”, con la que nos mostraban su faceta más melódica en el arranque para
posteriormente acelerar el paso y someternos ante la grandilocuencia épica de
sus vibrantes increscendos instrumentales.
Pero como
comentaba al inicio, el gran protagonista de la descarga de los tarraconenses
fue “Storms Of Desolation”, así durante el segmento central de su presentación
se fueron sucediendo temas como “Mortal Remains”, “The Falling Madness” y
“Rivers Of Flesh”, poniendo de manifiesto que Hyban Sparda y sus
muchachos siguen fieles a su estilo y sus raíces musicales, aunque en cada
disco sus composiciones suenan más maduras, complejas y ambiciosas.
Aunque el
respetable se mantuvo un tanto frío, lo cierto es que HYBAN DRACO nos
ofrecieron sólidos argumentos para comprobar el porque disfrutan del respeto y
el reconocimiento de los seguidores de las sonoridades más extremas. El broche
definitivo para una descarga que acabó resultando corta fue para uno de las
temas más imponentes y épicos de su discografía “Victoris Betrayal”.
La espera
previa a la aparición de DEMONICAL no fue excesivamente larga. Había
muchas ganas de comprobar como sonaría en directo la nueva encarnación de la
banda que lidera el bajista Martin Schulman, y más si tenemos en cuenta que su
nuevo material les ha permitido expandir su sonido hacia nuevos horizontes,
aunque sin perder sus clásicas señas de identidad. En cuanto a los nuevos
miembros cumplieron con creces con su cometido, destacando especialmente la figura
del vocalista Alexander Högdom, quien se mostró sólido y solvente a la hora de
atacar los temas antiguos y sobre todo, el batería Kennet Englund.
Acompañado
de una larga y majestuosa introducción el quinteto de Avesta irrumpía
parsimoniosamente en escena para rápidamente empezar a construir la
infranqueable pared sonora sobre la que cimentaron “Towards Greater
Gods”. Desde los compases iniciales del show pudimos comprobar que la
incorporación del batería Kennet Englund ha sido todo un acierto, ya que
andanadas humeantes y corrosivas como “The Order” sonaron como si fueran un
“castigo infernal”.
Quizás la única
pega que podría ponerse a la actuación del combo sueco fue su actitud un tanto
distante, ya que Alexander apenas se dirigió al público entre tema y tema,
permaneciendo de espaldas, -al igual que sus compañeros-, durante los momentos
de tensa calma que precedieron al demoledor “World Serpent”, con la que nos
invitaban a viajar hacía los tiempos de “Hellsworm”. La velocidad, la rabia
incontrolada y, en definitiva, el clásico sello del death metal sueco,
volvieron a dejarse notar con fuerza en otra de las nuevas “A Void Most
Obscure”, con los músicos inmersos en otra delirante sesión de headbanging para
acabar contagiando a los integrantes de las primeras filas.
Intercalando
nuevos temas con guiños al pasado, la velada prosiguió con “Return In Flesh”
que nos sumergía de lleno en un sonido más denso y pantanoso comandado por las
amenazantes líneas del bajo de Schulman. “Sung To Possess”, pese a su arranque
oscuro y cadencioso, acabó convirtiéndose en uno de los momentos cumbre de la noche,
con la banda pisando el acelerador a fondo mientras Kennet castigaba
implacablemente su kit de batería.
Uno de los
pocos momentos en los que Alexander se dirigió al personal fue durante los
prolegómenos de “The Arrival Of Armageddon”, que acabó dejando paso a la
copiosa lluvia que anunciaba la llegada de “From Nothing”, que era
la escogida para que el quinteto aplacara su ira y nos propusiera unos
desarrollos más melódicos y envolventes. No tardarían mucho las afiladas guitarras
de Johan Haglund y Eki Kumpulainen en volver a tomar velocidad para liderar el
envite que pondría punto y seguido a la velada, “Unfold Thy Darkness”.
Tras unos
instantes con el escenario desierto, Alexander regresaba para anunciarnos
que aún tenían algo más para nosotros. De modo que las ambientaciones
demoniacas y opresivas se apoderaron del recinto durante el tortuoso “All Will
Perish (The Final Liberation)”. No abandonaron el material de su obra de 2011,
“Death Infernal”, ya que un sobrecogedor alarido marcó el arranque de “March
For Victory”, con la que todos nos sumamos a la épica. Antes de dar por
concluido el show los suecos todavía exprimieron un poco más a sus
seguidores, ofreciéndonos argumentos de peso para que todos nos abandonáramos
al headbangong y el pogo durante “Death Metal Darkness”, con la que, ahora sí,
ponían el punto y final a una nueva lección de brutalidad, contundencia y
actitud, recuperando así la mejor esencia del swedish death metal.
TEXTO:ALFONSO DIAZ
FOTOS:CARLOS OLIVER
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