martes, 5 de noviembre de 2013

SARATOGA-BIKINI-BCN-31-OCT-2013


A principios de este mismo año 2013 Saratoga aterrizaban  en Barcelona para presentar su última entrega discográfica “Nemesis”, ofreciendo  una notable actuación en la que, además de ratificar la calidad de sus nuevas composiciones y la plena vigencia de su actual line-up, la formación capitaneada por el incombustible Niko Del Hierro conmemoraba su vigésimo aniversario. Pero cuando parecía que la banda estaba viviendo uno de sus mejores momentos, con una buena  repercusión y continuas giras por España y Latinoamérica, sorpresivamente a principios del mes de Agosto saltaba la notica mediante un comunicado, firmado por el propio bajista, en el que se anunciaba un parón indefinido en las actividades del combo madrileño.

Pero antes de que la banda inicie  este anunciado “periodo  de  hibernación”, el cuarteto ha decidido despedirse de sus seguidores sobre las tablas, embarcándose en una serie de conciertos de despedida en los que la formación madrileña ha preparado un repertorio muy especial, realizando un amplio  recorrido a lo largo de  sus dos décadas de música y metal, haciendo especial hincapié en los mejores  temas  registrados por la actual formación, además de ofrecernos un exhaustivo repaso de sus piezas más clásicas y representativas.

La noche de difuntos fue  la fecha escogida para su despedida  en la Ciudad Condal, eligiendo para una cita tan especial y emotiva la Sala Bikini, donde unas cuatrocientas personas se reunieron para ser testigos, -quizás por última vez-, del arrollador directo de una de las formaciones más representativas y longevas del heavy metal nacional. Según lo previsto, a las 21 horas, el cuarteto saltaba sobre las tablas al son de una portentosa "Tras Las Rejas" que, a modo de presentación,  nos anunciaba la intención del combo  de ofrecernos una rotunda sesión de auténtico y genuino  Heavy Metal. Motivados, compactos, y muy concentrados  el cuarteto  del foro demostró durante sus dos horas de show la experiencia y profesionalidad adquiridas a lo largo de los años, logrando conectar con el público  desde los primeros compases del show, apoyándose en  la efectividad de temas como el que sirvió para presentar a la  actual formación en 2007 "El vuelo Del Halcón", con el que consiguieron hacer rugir con fuerza a toda la sala.

Aunque la actual encarnación de Saratoga ha facturado tres álbumes  de  estudio, lo cierto es que la primera parte del show estuvo basada, casi de forma íntegra, en la etapa de su anterior vocalista Leo Jiménez, descargando de forma consecutiva trallazos desbordantes de fuerza y rabia metalera como "A Morir", con la banda dándolo todo sobre las tablas liderados por un pletórico Tete Novoa, o la más introspectiva y emocional "Contigo, Sin Ti", con toda la sala cantando la primera parte del tema,  para que acto seguido  fuera Tony Hernando quien rematara la faena con una extraordinaria aportación solista. De hecho,  creo que el guitarrista  es quien más ha crecido en directo dentro del seno de la banda, ya que en cada una de las actuaciones que he presenciado de la formación madrileña lo he visto más cómodo y entregado, asumiendo cada vez  una mayor cuota de protagonismo.

La efusividad de los fieles de la banda volvería a explotar al oírse los primeros compases  del siempre consistente "Ángel De Barro", único recuerdo que tuvieron  para su trabajo  de 2004 "El Clan De La Lucha", convirtiendo la pista del Bikini en un verdadero hervidero, gracias a la gran labor de la banda, y a un final rotundo y demoledor con Andy exprimiendo  al máximo su kit. Con la gente, a estas alturas, plenamente metida en la descarga del cuarteto madrileño  era el propio Tete el que se encargaba de introducirnos, a capela, el siguiente tema de la noche, un vertiginoso “Las Puertas Del Cielo”, que conseguiría mantener el nivel de euforia entre los asistentes, y que acabaría fundiéndose con un trepidante “Resurrección”, con el que la banda facturaría una dupla asesina que nos hizo  viajar en el tiempo hasta la época de aquel fantástico “Agotarás”, un plástico que marcó un punto de inflexión en la carrera de la banda.

Tras haber invertido la primera parte del show en el material de épocas pasadas, esta segunda parte del repertorio estuvo claramente basada en las composiciones facturadas por la actual formación, centrando su objetivo en los temas de sus tres últimas entregas de estudio, “VII”, “Secretos y Revelaciones” y su más reciente “Nemesis”. Tras el derroche de velocidad y contundencia llegaba el  momento de volver a relajar un poco los ánimos, recurriendo a la ambientación más emotiva y sentimental de “Hasta El Día Más Oscuro”, que fue magníficamente recibida, y que dejó a toda la sala coreando el nombre del vocalista. Aprovechando la magia creada, la banda continuó explotando el filón de las atmosferas más densas e introspectivas, regalándonos una soberbia interpretación de “Luna Llena”, en la que Saratoga volvió a demostrar su gran maestría a la hora de desenvolverse en esos medios tiempos rugosos y cargados de intensidad.

Tras el pequeño paréntesis, ideal para recobrar el aliento, llegaba el momento de volver a hacer subir las revoluciones de una audiencia  entregada a la causa, y que mejor forma que apostar por una de las piezas más rotundas y contagiosas que ha facturado la banda durante esta última época, una apoteósica “Deja Vu”, en la que Tete nos ofreció todo un recital a la hora de subir y bajar sus tonos agudos, a la vez que  jugueteaba con su pie de micro, creando un fantástico ambiente y una gran conexión con los fans. Aunque todos los presentes éramos conscientes de la emotividad de la actuación de esta noche, lo cierto es que sobre las tablas se respiró un ambiente distendido y de camaradería entre los miembros del grupo, que no dejaron en ningún momento de bromear entre ellos e intercambiarse cómplices miradas, consiguiendo que temas como “Juicio Final”, extraído de su más reciente “Nemesis”, sonasen realmente compactos y arrolladores.

Un técnico y vistoso solo a cargo de Andy, en el que el percusionista dejó claro porque es uno de los baterías más reconocidos y respetados de este país, sería el preámbulo para uno de los momentos álgidos de la velada, un intenso “Sigues Estando (En Mi Vida)”, que fue recibida con auténtica devoción por parte de  un respetable que acompañó incansablemente cada una de las composiciones de la banda. La vuelta a su material más reciente vendría protagonizada por la oscura densidad de “Perversidad”, marcando un punto de inflexión dentro de la descarga de los madrileños. La encargada de traernos de vuelta a los terrenos más netamente metaleros sería la  dupla compuesta por “No Sufriré Jamás Por Ti”, con Tete cogiendo un teléfono de entre las primeras filas para que un aficionado se llevara a casa un fantástico recuerdo de esta noche inolvidable, y el canto ecologista contenido en “El Planeta Se Apaga”, en la que el vocalista hundió su micrófono  entre las primeras filas para facturar un final inmenso y apoteósico.

Tras unos minutos de tensa espera, durante los  que la audiencia se desgallitó, literalmente, pidiendo la vuelta de sus héroes sobre las tablas, el cuarteto regresaba a todo trapo y dispuesto a arrasar con todo en este tramo final de actuación, recurriendo para ello a todo un himno, su clásico “Heavy Metal”, que sonó especialmente potente y arrollador con toda la banda dando el 120 % sobre las tablas  capitaneados por un Niko Del Hierro realmente intenso y entregado, que no dejó en ningún momento de obsequiarnos con su amplio catálogo de muecas y gestos a la hora de aporrear sus cuatro cuerdas. Una arrolladora interpretación del tema que prestaba título a su cuarto trabajo “Vientos De Guerra”, sería el encargado de conducirnos a un irremediable final marcado por una de las piezas más coreadas de la noche, la composición que cerraba su tercera obra de estudio “Mi Ciudad”, el devastador “Perro Traidor”, que fue la encargada de dar por terminada la fantástica actuación del cuarteto  del foro.

Una vez finalizado el concierto, y tras el acostumbrado reparto de púas y baquetas, muestras de cariño y agradecimiento por parte de los músicos hacía su público, y la sensación entre los presentes de haber sido testigos del “hasta luego” de una de las bandas más grandes y queridas de la escena metálica española. Sin duda, la descarga de Tete, Tony, Andy y Niko fue de aquellas que sientan cátedra, y es que el nombre de Saratoga siempre ha sido sinónimo de fuerza, técnica, metal y sobre todo entrega.

Habiendo sido seguidor de la banda desde sus inicios, únicamente me faltó para acabar de redondear la noche, y que la velada fuera realmente memorable, que el cuarteto se hubiera decidido a rescatar, aunque solo fuera de forma testimonial y a modo de homenaje hacia sus fans más veteranos, alguna pieza de sus dos primeros trabajos, ya que creo que un guiño tipo  “Ningún Precio Por La Paz”, “Loco”, o su versión del “Resistiré”, hubiera sido el broche perfecto para una velada tan especial y emotiva como la de esta noche. En cualquier caso, no me gustaría acabar esta crónica sin desear toda la suerte del mundo a cada uno de los miembros de la banda en sus próximos proyectos, y desear que este “parón”, que están a punto de iniciar, sea simplemente un pequeño descanso que les permita volver pronto con más fuerza y energías renovadas . Hasta entonces estaremos aguardando su vuelta.





TEXTO:ALFONSO DIAZ

FOTOS:CARLOS OLIVER

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